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Escuelas Católicas presentó su XIII Congreso, que se celebrará en Madrid los próximos días 29, 30 y 31 de octubre, bajo el lema “Sabemos educar. Libertad y compromiso”. Al acto de presentación asistieron algunos de los ponentes del congreso y el secretario general de la institución, José María Alvira, que, además de definir las líneas que marcarán el encuentro, aprovechó su intervención para resaltar la falta de consenso, necesario en momentos como el actual, en el que se escuchan, por parte de distintos grupos y formaciones políticas, discursos agresivos que atentan contra las bases de una muy trabajada libertad recogida en la Constitución, y reclamar disposición por parte de todos para lograrlo. |
Alvira reflexionó sobre los distintos mensajes que llegan a la ciudadanía y que, sin duda, vienen marcados por la proximidad de las elecciones generales de diciembre. A este respecto, aseguró que a su parecer los nuevos partidos emergentes no tienen un programa educativo muy definido, y que entre los consolidados, el Partido Socialista (PSOE), con sus nuevas propuestas que relegan la religión o se acercan más a la defensa de la educación pública, no parece haber valorado realmente lo que propone, y el Partido Popular (PP), a pesar de que teórica y tradicionalmente sus propuestas van más en línea con lo que se defiende desde Escuelas Católicas, está dejando patente, con ejemplos constatados, que existe falta de coherencia dentro de la formación.
El secretario general de Escuelas Católicas, que considera que no existe una verdadera conciencia social, quizá por falta de información, sobre la necesidad de la enseñanza privada y concertada, aseguró que no es cuestión de hacer campaña en contra de la educación pública como pudiera hacer ésta en contra de la otra red, sino que muy al contrario, se requiere apostar por una educación que sea de calidad, pero que no sea única, cuestión que define a un estado democrático, donde debe imperar una escuela plural, en el que quepan distintos modelos detrás de los que puede estar el estado.
Se trata de apostar por la libertad, por la posibilidad de que existan centros como los privados o los concertados, con proyectos educativos propios, que también puedan ser sostenidos por fondos públicos. En esto consiste la libertad, y por eso reclama un compromiso serio en el que realmente se escuche a toda la comunidad educativa, incluidos a los centros católicos, de enseñanza privada y concertada, a la hora de definir las líneas que marquen la educación de nuestro país.
En esta presentación también participaron Jesús Muñoz de Priego, abogado y defensor jurídico de distintas instituciones religiosas, que habló de su reciente libro “En defensa de la Libertad de Enseñanza”, en el que se exponen tres argumentos a favor la libertad de enseñanza: el argumento jurídico, mencionando el derecho reconocido en el artículo 27 de la Constitución; el argumento sobre el pluralismo, de obligada existencia en un estado democrático; y el argumento sobre los nuevos fines de la educación, encaminada hacia la globalidad. Le acompañaron también Siro López, teólogo y formador, que expuso la necesidad de un espacio interior de libertad que de pie a la creatividad; y Jesús Alcoba, director de la escuela de negocios de La Salle, que incidió sobre la importancia de la infancia y la adolescencia como etapas vitales y complicadas que nos llevan a preguntarnos sobre a qué tipo de sociedad debe responder la educación y qué educación es la que requiere nuestro modelo de sociedad, siempre desde la perspectiva de que el ser humano se construye a partir de la experiencia y es labor de todos hacer que la educación, tan influyente en esas etapas, cree esas experiencias que la hagan formar parte de nuestras biografías.
Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza
